Descripción

Son tus labios
color de vida que me distraen de la misma

son tus ojos
pequeño paraíso para ver el mundo

es tu sonrisa
canto del cielo para dormir en pleno vuelo

son tus manos
tersas flores que acarician el viento

es tu cabello
interminables redes en noches oscuras
donde quedo atrapado y no quiero escapar,

para robarle besos a esos labios
y no perderme de la vida,
para que me veas como yo te veo
y ver como tu ves,

inocente, confiando, sin rutina

y compartirlo todo contigo
y acomodar el mundo a nuestro antojo

es tu aliento soplo de vida
hacedor del tiempo que no existe y se consume a tu lado,
toda tú eres más que una vida,
vales más que mil palabras

toda tú estremeces mi cielo mientras me quedo en silencio . . .

Esto lo escribí hace unos cinco años, para alguien cuyo nombre iniciaba con S.

De suposiciones y realidades

Supongo q algún día moriré, entonces sabré si lo de la otra vida es real o un negocio rentable. Espero asistir a mi sepelio: llorar, reír y ser indiferente a mi partida

supongo que algún día llegaré, no se a donde, pero llegaré. Espero encontrarme con las personas que realmente me importan. Hay un río aquí cerca, podría caminar y sumergirme

supongo que algún día me desharé de este traje de estupidez, y junto a éste irán los prejuicios, y mi conciencia. Ese día me lanzaré al abismo, espero que el vacío no termine

supongo que algún día desaparecerá, todo desaparecerá; lo imagino, tan abandonado, como el limbo: lejos del cielo y del infierno

supongo que algún día dejaré de ser el soñador/optimista, y seré el realista, tal y como lo dijera Reneé alguna vez. Espero ese día morir o casarme con ella

El último día llegó desde hace mucho, se sentó, esperando a que yo notara su presencia. Ella fue la última, recuerdo que una vez dijo "destruyo todo lo que este en mis manos, aunque me haga bien, y no se por que..."

en el epílogo solo había una palabra. Fin. Ahora sé porqué el último día se sentó a esperar

...y entonces, me harté de jugar con la ingenuidad. Dejo de suponer y camino; conozco mi futuro, alguien leyó mi mano, me contó cada detalle. No se como lo supo, pero hasta el día de hoy, acertó.

Sin título (dice)

La tierra fue despojada de cualquier rastro de vida / mas siguió siendo fértil / el cielo tomaba el color de cada estación / los inviernos siguen siendo esperados ansiosamente / y se disfruta de cada gota de lluvia, de cada arco iris /de las montañas con neblina, de los caminos verdes y mojados / todo se mantiene vivo

por las noches, la oscuridad se asusta / huye momentaneamente con cada relámpago / parece un juego, en donde las palabras no cuentan / cada gota que cae se va hilvanando a la tierra. / Noche de luna creciente, cobijando sueños pendientes

parto de la nada / describo la aparente soledad / finjo desinterés y distracción / mas algunos días pueden decir lo contrario / estos pasos acompañados / esa cintura en mis manos / esas manos... en mis manos

Divagaciones...

A quien pertenece esa sonrisa
hacia donde ven tus ojos
cuantas puertas hay
antes de llegar a tu corazón

es así o tomé el camino largo.

en ocasiones ríes
con una sola mirada

un gesto de tu parte me dice tanto

eres como un espejismo
y yo, el incauto viajero
que intenta alcanzarte
mientras desapareces

en realidad existes
o es que te vi una única vez
y mi imaginación te fue creando
a partir de entonces

un cuento

Contaba historias en tercera persona haciendo referencia a las propias, reales e imaginadas. Describía sus personajes un tanto irreales como aquel que despertaba por las tardes de noviembre y diciembre, cuando el son pintaba de naranja el cielo mientras iba cayendo detrás de un volcán, llegaba acompañado de una bicicleta y en ella perseguía el atardecer por el camino que abandona el pueblo, hasta quedar casi exhausto cada estación trae sus propios fantasmas, solía decir, y cuando se marcha, se los lleva con ella, luego la siguiente llega con los propios, algunos arrastran cadenas, los conozco a casi todos, al llegar le cuentan su historia, él con paciencia la escucha, aunque cada año la repitan. A veces desconocidos, a veces falta alguno, dejó de penar, cuenta alguien, por fin se marchó, ahora si esta donde debía estar. Cuando la estación se va él llega hasta el puente en bicicleta para despedirse de ellos, sabe que el próximo año más de alguno no volverá alguna cara nueva aparecerá. Montan un rayo de sol y desaparecen en el horizonte.

Mañana lloverá es por eso que el cielo se ve tan azul hoy, para que mañana no le extrañen, aunque los mortales regularmente ven sus zapatos mientras caminan, a veces lo hacen a propósito, les desagrada ver como las aves vuelan en libertad, pero no envidian el hecho de volar sino la libertad, les preocupa que alguien les vaya a pisar mas no pisar a alguien, el egoísmo les empequeñece, convierten sus sueños en nada, dejan olvidada la esperanza bajo la cama, tienen miedo de llorar, de rasparse las rodillas al caer, dejaron de ser niños cuando se dejaron arrastrar por la vanidad, es por eso que las estaciones vienen y se van, cada una pone de su parte para salvar las almas del mundo, con noches de luna, con atardeceres color naranja, calles mojadas que con la neblina parecieran estar difuminadas.

Cada escena nos hace levantar la vista, soñar, reír y llorar. Dejar el espíritu volar, que hable el niño, que florezcan los sueños...

...Granizo...

Es el relato de un viaje - de principio a fin - del iluso que pretende serle fiel al olvido - es el relato de la sonrisa que causo un desquicio - es el relato...

Sin más que un manojo de ilusiones, en la mano conservaba trocitos de granizo que las nubes expulsaban, éstas habían cubierto de gris el cielo ignorando el medio día.

des - ve - lo

--La extraña sensación de...-- Tacho las letras, a las que apenas hace un momento les di vida y vuelvo a escribir.

Creo que eso se llama miedo/cobardía y no tiene razón de ser albergarlo entre las pertenencias que se apilan en el rincón del cuarto.

Mientras cada día se envuelve en lo absoluto/relativo, pienso, tomo la decisión de caminar sin prestar atención al significado de dichas palabras.

--Lanzo algunas bengalas... -- Vuelvo a tachar las lineas, me convierto en dictador, aquel que arremete contra libre expresión y censura lo que le agrede.

Leo las palabras que describen una imagen, las que identifican a la niña/mujer por quien estoy despierto a estas horas.

Le dedico algunas canciones, le escribo algunos versos, le cuento algunos sueños para luego dormir.

Destello

No hay nada, no existe tiempo ni espacio, como si no hubiese mañana. Me aferro a un vaso de vino, a un lápiz y a un cuaderno. De fondo Jaguares "Déjate ver". Ya no odio la soledad, ahora se quedó ahí y le tome cariño. Me despido, no puedo estar más en este lugar, se quedan todos los nombres. Me olvido del mundo mientras el vaso tenga vino, no hay nada más allá de estas cuatro paredes. Ahora veo todo eso como vestigios de lo que una vez existió. Cada cuerpo de mujer que albergaba a una diosa, y yo, el adorador que entonces era. Figuras que se abrazan llenando el ambiente de incógnitas. Me despojo del cuerpo, echo al suelo cada ídolo, todos aquellos que fueron nombrados, cuya imagen muchas veces acompañada de versos se tradujo en caos. Me desprendo del cuerpo, lo devuelvo a la tierra para formar parte del universo. Camino con paso firme, sin perder la fe. Fin sin epilogo, el epilogo es lo que viene, una historia aparte que ya se esta escribiendo.