19 de marzo de 2009

Vuelve a fluir ese río, ahora emanando de otras rocas, esto no es una historia, ya dejó de ser novedad, y no se puede escapar porque pasa lo que debe pasar. Espero que la corriente solamente pase a la par del pueblo, sin destruir las pequeñas casas, como ha sucedido en ocasiones, que sea un sustento, que fertilice la tierra, que llegue como un arrollo, que hayan peces, que no arrastre piedras. En el pueblo los fieles acuden a la iglesia, algunos piden porque no venga, otros que sea un arrollo, un río no tan caudaloso y unos cuantos imploran porque destruya todo cuanto hay en derredor, para ya no estar o marcharse a otro lugar, parecieran no saber lo que en verdad desean. Solamente soy un observador, todo esta sucediendo ya, siendo muy difícil predecir.

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